EL NUEVO ORDEN MUNDIAL
Publico esta entrada sabedor de que mucha gente me catalogará de conspiranoico, pero como el nombre del blog deja bien a las claras soy muy consciente de que mi pensamiento va en dirección contraria a las modas, a la modernidad, al pensamiento único que se trata de instaurar para crear un nuevo orden mundial donde seamos sumisos, incapaces de pensar por nosotros mismos, decir amén cual borregos a cualquier aberración que se nos venda como “progre”. Ya he explicado en otras entradas que nuestra civilización se ha entregado en las manos de una bestia que quiere eliminar nuestra voluntad haciéndonos creer que somos nosotros voluntariamente los que decidimos. Martillean nuestras mentes desde sus centrales mediáticas para lavar nuestros cerebros. Detrás de todo ello está el mismo Satán, el príncipe de este mundo, que ha sabido aunar la codicia, la vanidad y las ansias de poder de algunos hombres relevantes que en pos de acaparar más poder todavía, se han erigido en sus ministros.
Su principal cabeza es una organización discreta, revestida incluso de cierto aire de misterio que la hace más interesante, oculta hasta hace poco tiempo, incluso envuelta en esoterismo. Pero ante el predominio que están tomando sus postulados, cada vez sale más de su anonimato para hacer evidente su poder y su notoria influencia en la clase política de Occidente, ayer mismo celebraron una cena en Barcelona e invitaron al Presidente de la Generalidad, a ese pobre tonto útil apellidado Puigdemont (¿Qué habrá prometido esta secta demoniaca a los chicos del 3% respecto al proceso soberanista?).
La Masonería, que apareció en el siglo XVII en la Europa de los constructores de catedrales donde todo era hecho para mayor gloria y alabanza de Dios, era una organización que nació como con un ideal filantrópico y filosófico para el crecimiento del libre pensamiento humano frente a la ”imposición” de la Iglesia. Cuatro siglos ha tardado en evidenciar su auténtico fin, desarraigar la idea de Dios del Hombre, convertir la sociedad en un maremágnum ateo, dirigido por una élite que controla los centros de poder desde la ONU hasta los principales gobiernos de la Europa Occidental incluyendo a la misma UE y el Consejo de Europa, que pregunten a los polacos y a los húngaros como está siendo la persecución a sus gobiernos por negarse a aceptar las directrices masónicas en sus países. En una lucha sin cuartel intentaron implantarse en EEUU cuando el país nació como tal tras independizarse de Inglaterra, pero en aquellos días los Padres Fundadores, profundamente cristianos, consiguieron imponerse, incluyendo en su Constitución los preceptos y raíces cristianos como elemento básico e integrador del país. Allí han estado silentes, trabajando en la sombra durante dos siglos, esperando su momento y a bien que lo han aprovechado durante los 2 infaustos mandatos de uno de sus prosélitos, Barack Hussein Obama. Pero el pueblo americano ha reaccionado y aunque sea en la figura del peculiar e histriónico Trump ha puesto freno a la deriva masónica que estaba destruyendo los cimientos de América. La rabia, la ira de los caballeros masones es tal que han instigado revueltas sociales y boicots al presidente elegido democráticamente, desde el minuto 1. Una gran derrota para la bestia.
Sin embargo en Europa desde la Revolución Francesa los tentáculos de la masonería se han ido extendiendo haciéndose cada vez más poderosa, abarcando todos los centros de poder, creando una red que a día de hoy dirige a su antojo instituciones, partidos políticos, sindicatos y medios de comunicación, siempre de una manera discreta, en la sombra, pero a la vez constante e inflexible. Ellos son los verdaderos artífices de una Europa en desintegración donde habiendo apostatado de nuestra esencia cristiana hoy se imponen teorías aberrantes que llevan a la destrucción de la sociedad. Un feminismo exacerbado, radicalizado y violento ha llevado unas loables intenciones de igualdad entre hombres y mujeres a cotas de irracionalidad que abogan por la estigmatización del hombre por el simple hecho de serlo, alientan el aborto libre que nos condena a la desaparición, entre 2010 y 2014 una cuarta parte de los embarazos en todo el mundo terminaron en aborto. Con la inestimable colaboración de otro personaje siniestro, el judío Gorge Sorsos, que financia campañas a grupos tan irracionales como “FEMEN”, el feminazismo está cada vez más en auge.
Desde los años 60, la ONU impulsa, financia y potencia programas de esterilización y contracepción, alegando de manera infame que es para proteger a los países de la expansión de epidemias; se han alentado campañas anticonceptivas, imponiéndolas a los gobiernos de África y Asia a cambio de programas de desarrollo económico. A los que se negaban al desarrollo de los planes se les negaba la ayuda económica. Para evitar las epidemias no se programan campañas de medicación o vacunación, si no abortos y contracepción, una auténtica aberración demoniaca. En la Europa civilizada, moderna y progresista, una vez implantada esa mentira de la libertad de la mujer a través de abortos que hacen ricos a miles de clínicas asesinas que se enriquecen con la muerte de inocentes y la destrucción moral de pobres mujeres engañadas a las que se prometió un poder de decisión sobre su cuerpo que las deja profundamente heridas en su alma para siempre, ahora llega la terrible ideología de género que confunde, engaña y condena la infelicidad a nuestros niños, a nuestros hijos. Quieren inculcarle desde los 3 años sus perversas ideas inspiradas por el príncipe de la mentira. No está determinado tu genero, puedes ser lo que quieras, prueba y elige lo que más te gusta; destrozando así sus tiernas e inocentes mentes infantiles, con la aquiescencia de madres y padres que refuerzan esa ideología no solo por no revelarse sino por inducir en muchos casos a sus hijos a que tomen ese tipo de decisiones aberrantes ¡Que desastre! Confundir y escandalizar a los más pequeños, más les valdría ponerse una piedra de molino al cuello.
Todo esto puede sonar muy apocalíptico, desmesurado y como he comenzado diciendo, conspiranoico. Pero aprovechándose de esos términos para descalificar a los que denunciamos sus perversos planes, las grandes logias avanzan inexorablemente en su plan de convertir el mundo, en un reducto para las élites masónicas, únicas verdaderamente dignas de disfrutar de los recursos de la Tierra. Detrás de esas campañas en pos de la despenalización del aborto, la esterilización de África y Asia donde la maternidad aun es muy alta, del impulso sin freno de la homosexualidad y de la implantación de la ideología de género se esconde un maquiavélico plan de ingeniería social, de macro eugenesia, trazado para dirigir a su antojo la demografía mundial y así implantar su NUEVO ORDEN MUNDIAL. La bestia no descansa, pero… “Las fuerzas del mal no prevalecerán”.